Parece ser que la equitación no es un
deporte. Siempre escucho decir que la equitación no es un deporte. Dicen
que es fácil, que no hace falta saber, que solo nos sentamos y no
hacemos nada. Pero quisiera saber si alguna vez confiaron en un
ser impredecible que tiene su propia alma. ¿Alguna vez se cayeron
de 1,80 m, y se volvieron a montar? ¿Corrieron alguna vez hacia
un obstáculo a toda velocidad que era mucho más grande que vosotros? ¿Lograteis alguna vez una conexión con un animal que ni habla su propia
lengua? ¿Alguna vez pusieron su vida en peligro por un deporte? Sigan
diciendo que es fácil, pero nosotros sabemos. Porque sin errores, no hay
victoria. Sin entrenamientos, no cumplimos. Sin debilidades, no hay
progreso. Sin esfuerzo, no hay orgullo. Sin caídas, no hay determinación
para volver a montarse. Sin dedicación, no hay pasión. Sin confianza,
no hay ninguna oportunidad. Sin coraje, no lo conseguiremos. Eso es lo
que somos.
MONTAR A CABALLO NO ES SÓLO MONTAR.
No hay comentarios:
Publicar un comentario